México es un país que irradia vida. Se dice que Salvador Dalí no quería viajar a México porque decía que no le gustaba que existiera un lugar más surrealista que sus pinturas. 
La capital es sin duda el lugar donde se puede experimentar una verdadera experiencia mexicana. Si bien las playas son un paraíso, en la Ciudad es donde todo sucede. Si se tuviera 24 horas para conocer todo lo necesario esta es la recomendación. 
 
A la mañana
Lo primero que tenés que hacer es desplazarte al centro de la Ciudad. Hay que tener en cuenta que México es un país con mucha gente, por lo que lo ideal es que entre más temprano vayas a tu destino, menos tráfico te tocará. Una vez en el centro, podés recorrer la explanada del Zócalo Capitalino y al mismo tiempo conocer el Palacio de Gobierno y la Catedral. Como todo se encuentra en el mismo recinto, no tendrás problema en encontrar todo. Después de eso, elegí uno de los miles de restaurantes que se encuentran en las terrazas de los edificios aledaños para tomar un merecido desayuno. 
Terminando esta comida, utilizá el tiempo para recorrer la calle de Madero y descubrir las tiendas que hay.
El Zócalo se conecta con el Palacio de Bellas Artes y la Alameda Central que es uno de los escenarios más bonitos de todo México. Ahí podrás disfrutar de la música local, vendedores ambulantes y tomarás unas de las mejores fotos de todo tu viaje. 
 
A la tarde
Terminado esto, preparate para tomar un Turibus que te lleve por la avenida de Reforma dirección Chapultepec. En este recorrido estarás en la calle más famosa de la ciudad y tendrás una vista de los modernos y altísimos rascacielos que hay. No olvides parar para sacar una foto en el Ángel de la Independencia. Continuá el recorrido hasta llegar al Museo de Antropología, es uno de los cientos (¡realmente son 170 museos y 43 galerías que hay en toda la CDMX!) de museos que podrás encontrar y que explicará cómo era el México prehispánico y un poco de la historia que ha vivido hasta nuestros días. Tomate el tiempo que necesites, pero cruzando la calle está el Parque de Chapultepec, que incluye un Castillo, dos lagos, salas de concierto, restaurantes y varias actividades que realizar. Si querés podés elegir este lugar para comer o puedes viajar a Polanco o la colonia Roma para ir a restaurantes verdaderamente espaciales, chic y bohemios. 
 
A la noche
Terminá la noche en Coyoacán. Ahí se encuentra uno de los mercados tradicionales de México, la casa de la famosa Frida Khalo (revisá los horarios) y un mercado con las artesanías más representativas de todos los estados de la República Mexicana. Finalizá el día cenando en un agradable restaurante con música clásica y rodeado de un gran ambiente. 
 
Todos estos destinos se encuentran muy cerca uno del otro, por lo que podrás viajar en transporte público o en algún transporte privado como Uber o Didi. No te podés perder la comida tradicional y aventurarte a degustar algún antojito de la calle. La Ciudad de México es un destino imperdible, sus calles, su gente y su comida son un gran imán para conocer una gran cultura.